No quedan brasas bajo la ceniza,
ni sal sobre las letras del teclado.
El punzón de tu desdén se ha quebrado
dejando en mí una herida imprecisa.
No madura lo que no cicatriza.
Se repiten las fallas del pasado.
La pasión es un fuego despiadado,
un ciego caminando en la cornisa.
Quedan los restos fríos de un anhelo,
la boca de un pez que busca tu boca
en el filo mortal de algún anzuelo.
En la obscena soledad desemboca
el sueño de tu piel de caramelo
que nubla casi todo lo que toca.
- Dany Marlowe -
Vivimos en un mundo relativo. Nada en este mundo es verdad. Todo depende. Aún la más verdadera verdad oculta la siempre ingrata posibilidad de ser mentira. Por ello este sitio se declara mentiroso. Porque las mentiras también son relativas; y entonces, aún la más mentirosa de ellas encierra entre sus letras la sublime posibilidad de ser verdad.
jueves, 17 de diciembre de 2009
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